El abuelo de mi marido era muy capo. Pero muy, muy. Ese tipo de señores geniales, siempre divertido, siempre sonriente, siempre con alguna anécdota y en busca de alguna aventura. Incluso a los 80 y pico seguía lleno de pilas viajando por el mundo. El y su mujer, Pipina - no se pierdan esta receta de ella que es increíble! -, siempre fueron mi ejemplo a seguir. Tener ganas y alegría no importa la edad o las circunstacias, es la mejor enseñanza del mundo.
Bueno, resulta que el lunes Vicky de Cantando Victoria publicó una foto de yerba Playadito y le conté que era del yerbatal del abuelo Chichito. Chichito entre sus múltiples aventuras vivió en Apóstoles, Misiones con toda su familia. Allá, cultivó yerba y formó una cooperativa, la que produce Playadito. Mi suegra vivió ahí años de su infancia, fue al colegio, crió a un monito bebé cuando mataron a su mamá y tiene los más lindos recuerdos.
Desde que me casé, el abuelo siempre tenía yerba en el altillo de su casa y en la mía siempre se tomó Playadito, incluso antes de encontrarla en todos los supermercados. Además de ser ¨la yerba del abuelo¨ siempre fue mi preferida.
Aunque ya el yerbatal no es de la familia, sigo eligiendo Playadito en el super y le guiño el ojo a Chichito que seguro está en el Cielo, entreteniendo a todos con sus historias increíbles.
Vicky, te prometo que cuando vaya a visitar a Lulú a Chile, te llevo Playadito!

¿ustedes toman mate?
¿Cuál es su yerba preferida?
¿probaron Playadito? 
¿Conocen Misiones?
Yo quiero ir.
Si tienen ganas,
cuentenmé de sus abuelos!

PD: mantel Julieta y azucarera Limón de Sólo para Mí